EL SOFER
Oleo. 2017. 120 x 90 cm. Ídem Carbón sobre 85 x 65 cm.
Entre los judíos, escriba e intérprete de la ley divina. En plural “sofrim”. Existen desde hace 3300 años. Son expertos en caligrafía y normas específicas de escritura. Deben atenerse a 4000 leyes que hacen a un texto sagrado. Está habilitado para transcribir textos religiosos: las filacterias y mezuzot (texto que significa bendición y protección). Se coloca envuelto en un pequeño envase en la jamba derecha de las puertas. En Israel se otorgan títulos oficiales validos mundialmente. El trabajo más exigente es escribir un rollo de la Tora. Puede tardar un año en escribirse las 250 columnas. Se trabaja sobre un tablero inclinado. La tinta es especial, con gran brillo y duración. (Puede durar bien mantenido 200 años) Se escribe sobre cuero vacuno preparado y lijado con una pluma de ganso. Los renglones son marcados por un punzón y tienen una medida equivalente a seis y media plumas. Previamente recita una plegaria. Este rollo es “Kasher” y se guarda en el templo. En esa ocasión se celebra con una fiesta y el texto entra en vigencia. Con el tiempo las letras se deterioran (enrojecen) y un Sofer experto las restaura. Las letras no pueden tocarse y se debe respetar una separación mínima de un cabello entre ellas. Tampoco pueden estar tan separadas que pueda entrar entre ellas una letra chica. Los pergaminos más antiguos son los Rollos del Mar Muerto. Estas escrituras son textos sagrados y tienen una carga especial de espiritualidad y misticismo.
EL SOFER
Oleo. 2017. 120 x 90 cm. Ídem Carbón sobre 85 x 65 cm.
Entre los judíos, escriba e intérprete de la ley divina. En plural “sofrim”. Existen desde hace 3300 años. Son expertos en caligrafía y normas específicas de escritura. Deben atenerse a 4000 leyes que hacen a un texto sagrado. Está habilitado para transcribir textos religiosos: las filacterias y mezuzot (texto que significa bendición y protección). Se coloca envuelto en un pequeño envase en la jamba derecha de las puertas. En Israel se otorgan títulos oficiales validos mundialmente. El trabajo más exigente es escribir un rollo de la Tora. Puede tardar un año en escribirse las 250 columnas. Se trabaja sobre un tablero inclinado. La tinta es especial, con gran brillo y duración. (Puede durar bien mantenido 200 años) Se escribe sobre cuero vacuno preparado y lijado con una pluma de ganso. Los renglones son marcados por un punzón y tienen una medida equivalente a seis y media plumas. Previamente recita una plegaria. Este rollo es “Kasher” y se guarda en el templo. En esa ocasión se celebra con una fiesta y el texto entra en vigencia. Con el tiempo las letras se deterioran (enrojecen) y un Sofer experto las restaura. Las letras no pueden tocarse y se debe respetar una separación mínima de un cabello entre ellas. Tampoco pueden estar tan separadas que pueda entrar entre ellas una letra chica. Los pergaminos más antiguos son los Rollos del Mar Muerto. Estas escrituras son textos sagrados y tienen una carga especial de espiritualidad y misticismo.